jueves, 3 de noviembre de 2011

Las dos caras de la India

Hay dos formas de conocer India: viajando y viviendo.

Todo el mundo que viene a India, por regla general, ven la hermosa India del norte (Delhi, Agra, Varanasi...) y vuelve maravillada diciendo que todo es precioso, que la gente es muy agradable y en general, que han vivido una experiencia muy gratificante. Grupos organizados, guías políglotas que te llevan de la mano a ver lo mejor, hoteles de muchas estrellas y sólo una o dos semanas de viaje... así se disfruta hasta en el infierno. Por el otro lado, existe también el viajero de "tiempo sabático", que experimenta la vida en este país sin ningún tipo de ataduras excepto el tiempo y el dinero, pero con una completa libertad para saborear con paciencia lo que esta tierra tiene que ofrecer... viajando de norte a sur y de este a oeste, uno puede deleitarse con, incluso, la oportunidad de "encontrarse a uno mismo".

Luego estamos los que vivimos la India en sentido literal: vivimos aquí. Por regla general, la adaptación es un proceso que uno nunca sabe cuándo va a terminar exactamente, y dependiendo de la ciudad puede ser más o menos intenso. Con total seguridad, alguien que vive en Chennai no vive igual que alguien que resida en Gujarat, Kolkata, Mumbai, Bangalore o Hyderabad. Y a mí en concreto me ha tocado la fea, gorda, coja y desagradable Hyderabad para bailar.

Seguramente si me hubiera tocado alguna de las ciudades "guapas", quizá vería la vida con otros ojos, pero realmente ésta no es la ciudad más bonita del mundo, ni muchísimo menos. En cuanto al ambiente, está hipercontaminado, tanto acústica como higiénicamente hablando, gracias a la contribución del altísimo número de vehículos que por sus calles (por llamarlas de alguna manera) circulan, el poco civismo de la gente que tira cualquier cosa a la calle (objetos, basura, esputos de "pan"-mezcla de hierbas "aromáticas" que la gente gusta mucho de mascar- orina y heces entre otros) y la maravillosa atracción de porquería por doquier. Por ejemplo, limpias la terraza y por arte de magia y (con perdón) mierda, se te transforma en una magnífica mezcla de trabajo en vano con más suciedad de la que antes de limpiar había. Y del ruido, ni hablemos... desde la calle hasta el lugar de trabajo, donde en todos y cada uno de los pisos están haciendo obras y el delicioso daño que hacen a los oídos llorar de rabia y de coger al de la máquina de turno y metérsela por el...

La sociedad en general es bastante decadente en cuanto a maneras, y mientras uno intenta respetar las colas por ejemplo, la gente está costumbrada a pasárselas por donde les place y a ponerse ellos los primeros. Es bastante gracioso, ya que muchos autobuses rezan: "In India, it's always you before I" (En India, siempre tú vas antes que yo). Qué bonito es soñar. La mayoría de la población no conoce el respeto ni el derecho a la intimidad ni valores de convivencia normales. Sé de sobra que por mucho que quisiera, no podría cambiar el tercer mundo, pero la gente se piensa que, como eres extranjero, eres algo parecido a un cajero automático con piernas... e incluso, si das alguna monedilla a alguna persona de la calle, hasta te piden más. Asimismo, al parecer la clase alta es la que más falta tiene de educación pues ya que tienen dinero, no la necesitan y sólo se limitan a vivir vidas estrafalarias y a gastar de manera incontrolada (por lo menos le hace bien a su país y a su ciudad). La pena de todo esto es el gran abismo que hay de los unos a los otros, aunque en el fondo comparten lo mismo en su mayoría: la falta de respeto y de educación.

Parece que me estoy quejando de este país, pero no es así: lo estoy describiendo. Eso sí, tengo que reconocer que este país tiene también cosas maravillosas, pero de eso ya hablaré en otro momento... voy a ver si molesto a alguien por una rupia y le echo un vistazo más de cerca a las dos caras de la moneda.

4 comentarios:

  1. Me encanta lo que cuentas, esta muy bien que digas lo bueno y lo malo que siempre existe y se trata de tapar. dale un beso a Ana y dile que la quiero mucho y que tengo ganas de que escriba cosas y que cuente.

    ResponderEliminar
  2. Hola, compatriota. Jo, me ha hecho mucha ilusión leer este post. Yo también vivo en Hyderabad desde hace 4 meses y también oía a todo el mundo diciendo lo genial que era India y sus gentes... Tanto que ya no sabía si la excepción era Hyderabad o es que el problema era mío. Leer tus comentarios me tranquiliza. Bueno, enhorabuena por tu blog. Yo tengo el mío por si quieres leer otro punto de vista: http://hyderabadblues.blogspot.com/
    Un saludo y mucho ánimo.

    ResponderEliminar
  3. hey, justo... siento no haber podido contestar antes... a ver si nos juntamos... este finde nos vamos a reunir unos cuantos españoles... si quieres, mándame al mail tu teléfono y te llamo mañana por si te apetece unirte, ok? un saludo!

    ResponderEliminar
  4. y a tí, Lorena... me alegra que vayas a venir!!! y mucho!!! te iremos preparando la habitación de invitadas, jjj!!! un beso y un abrazo, guapetona!!!

    ResponderEliminar